Por Elías Soso
Quiero hacer público desde el punto de vista personal y sin que implique un compromiso institucional lo que pienso sobre el funcionamiento actual de las tarjetas de crédito que naturalmente tienen un lado altamente positivo porque con su sistema han generado el sostenimiento de un ritmo de ventas creciente. Sin embargo, lo que llama la atención es por qué en un sitio determinado con tarjeta hacen descuentos especiales y por el contrario con el efectivo en la mano no lo hacen de la misma manera. Creo que es algo que está dando la imagen de una moneda creada por el sistema financiero que tiene más valor que la plata. Además, es una desigualdad evidente ante la ley por parte del consumidor. Es decir, si uno no quiere usar tarjeta ¿por qué con efectivo no se le hace el mismo descuento? ¿No será que los bancos pagan esa diferencia? Y si lo hacen ¿por qué no extenderlo a todos los comercios?